La palabra inversión inmobiliaria ha despertado el interés y expectativas de un gran número de inversionistas financieros y de ciudadanos sin limitaciones debido a su amplia rentabilidad, al aumento de capital y a los beneficios ofrecidos.
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Una forma de inquirir en el sector inmobiliario, es hacerlo a través de los SOCIMI (Sociedad Anónima Cotizada de Inversión Inmobiliaria), debido a su función de adquirir, promocionar y rehabilitar activos urbanos para su posterior arrendamiento y comercialización, siendo una de las principales características su tendencia a cotizar en la bolsa aumentando su capitalización y mejorando el rendimiento.
Con el paso de los años los SOCIMIS han profesionalizado su inversión y gestión, ya que años atrás los inversionistas adquirían directamente un inmueble de por vida, con todas sus vicisitudes e inconvenientes. Cosa que no ocurre con los SOCIMIS debido a que la inversión se hace a través de activos generando una rotación constante y mucho más optimizada y con la posibilidad de obtener mucha más rentabilidad al permitir la distribución de estos activos entre sus accionistas, situación que no sucede al comprar un inmueble.
Las cifras de los SOCIMIS cotizadas en la actualidad resultan convincentes, por lo que son un factor importante para los inversionistas debido a que se comercializan con fondos privados y tienen una mayor diversificación y menor liquidez.
La clave para invertir en este sector, es seleccionar un nicho de mercado ya sean hoteles, centros comerciales, oficinas, residencias, etc., ya que cada una está focalizada a ventajas, estrategias, potenciales y consumidores diversos.
