Te has preguntado porqué si todos vivimos las mismas horas cada día, hay personas que hacen mucho más que otras y son más exitosos que los demás. Si nos dirigimos un tiempo atrás a recordar aquella experiencia exitosa que marco nuestra vida y nos sentamos a analizarla, nos daremos cuenta que el elemento básico es que habíamos centrado nuestra atención en lo único. Buscar lo único es la mejor manera de conseguir lo que quieres.
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Para llegar a este resultado debes comenzar por relacionar los que has conseguido con tu modelo de enfoque y responder la siguiente pregunta: ¿sabes qué tienes que hacer para que las cosas funcionen? Comienza por identificar los cambios que tienes que hacer en tu vida, puedes comenzar haciendo una lista, de modo que realices cambios pequeños pero que en conjunto sean sorprendentes, con ello experimentarás un cambio positivo y drástico. A medida que te vayas acercando al éxito, entenderás el concepto de lo único.
Simplificar te permitirá ignorar todo aquello que te aleja de tu objetivo y te enfocará en dedicarte a hacer aquello que debes hacer, reconociendo que no todas las cosas importan igual y encontrar aquello que más importa, de esta manera vinculas más estrechamente lo que haces con lo deseas. Con ello te darás cuenta que obtener resultados extraordinarios viene estrechamente relacionado con cuánto seas capaz de reducir, siendo esto la clave del éxito.
El problema es que la mayoría de la gente hace lo contrario, buscan alcanzar objetivos invirtiendo mucho tiempo y dedicación pensando que el éxito es complicado de alcanzar y en consecuencia sobrecargan su agenda y la lista de pendientes los superan. Es en esos momentos cuando el éxito les parece inalcanzable y comienzan a conformarse.
Recuerda que tenemos un tiempo y energía limitada, de modo que cuando abarcamos mucho no logramos controlar todo y en vez de sumar nos dedicamos a restar.
Simplificar es una estrategia sencilla y extraordinaria porque tiene un solo objetivo, acabar conduciéndote al punto clave, alcanzar el éxito.
