Las empresas del sector inmobiliario deben de considerar la constante formación de sus equipos de agentes inmobiliarios como una inversión tan necesaria como rentable, pues constituye un elemento esencial para la mejora y mantenimiento de su nivel de eficacia en el sector.
También te puede interesar: 8 actitudes de agentes inmobiliarios exitosos y productivos
El sector inmobiliario es cada vez más exigente en nuestro país y es por ello que también demanda a profesionales más competentes. La actualización y formación permanente de calidad, debe convertirse en una "estrategia de negocio" permanente en todas las empresas del sector inmobiliario con un claro propósito: incrementar y actualizar las competencias profesionales de sus empleados, para mantener y seguir creando un ambiente de desarrollo profesional bien calificado por los mejores estándares del sector.
Las agencias y franquicias inmobiliarias no solo deben de esperar ciertos resultados, después de invertir en capacitación, si no además, deben exigir un incremento evidente en la productividad y el rendimiento global en las funciones, tanto a nivel individual como colectivo de sus equipos comerciales; alcanzando estos cuotas y niveles de eficiencia envidiables, tanto para sí mismo, como para su competencia más directa con lo que eso significa. Así mismo, debe existir un cambio importante en la atención al cliente durante todo el proceso de relación profesional y personal que se establece con el.
En los asesores inmobiliarios con poca o sin ninguna experiencia, la intuición y el ensayo error hasta adquirir habilidades profesionales y comerciales, NO ES EL CAMINO CORRECTO. Más cuando se trata de gestionar la venta del producto más caro que existe en cualquier tipo de mercado, la compra-venta de viviendas.
Una empresa, agencia o franquicia inmobiliaria que aspire a ser realmente competitiva marcando una diferencia, establece calidad en su trabajo. La rotación constante de sus empleados merma esta diferencia y está relacionada con la falta de motivación y formación de sus agentes.
La rotación constante genera desgaste en imagen, marca corporativa y credibilidad como entidad inmobiliaria. Aquella agencia que se considere referencia de otras, debe tener en cuenta que solo evitando rotaciones, podrá conservar a los mejores y más calificados agentes dentro de su empresa, de tal modo que no sean tentados por la competencia directa.