Con anterioridad en el blog de ICHI, escribimos sobre los beneficios de la rama Inmobiliaria en el derecho. Esta vez te compartimos las principales funciones que, los abogados especializados en esta rama, realizan en su día a día y su estrecha relación contigo que eres un profesional inmobiliario.
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Comprar, vender e incluso alquilar una vivienda son operaciones que se llevan a cabo con bastante frecuencia. Pero exigen un papeleo y una serie de conocimientos específicos que no todo el mundo tiene. Por ello, con frecuencia resulta muy aconsejable contar con los servicios de un abogado inmobiliario.
El alquiler es una de las formas más habituales de acceder a una vivienda, especialmente para los más jóvenes. Para que la relación entre inquilino y propietario del inmueble se desarrolle con la mayor normalidad posible, lo mejor es que los derechos y obligaciones de ambas partes queden bien claros desde el principio.
Un abogado inmobiliario puede encargarse de la redacción del contrato y de explicar a arrendador y arrendatario los derechos y obligaciones que van a tener desde el momento de la firma.
Este especialista también puede encargarse de elaborar un contrato de fin de arrendamiento, para que el alquiler finalice de la mejor forma posible y sin que ninguna de las partes tenga nada que reclamar a la otra.
Un experto en derecho inmobiliario puede encargarse de revisar el contrato de compraventa y asegurarse de que todo esté orden, sin cláusulas abusivas que puedan afectar a los compradores en el futuro.
Si ya se ha comprado un inmueble, el especialista puede revisar la escritura y ayudar a reclamar frente a la cláusula suelo si el banco la ha incluido en la hipoteca. En el caso de la venta de inmuebles el abogado inmobiliario también puede ser de gran ayuda. El experto puede indicar si corresponde o no pagar la plusvalía municipal.
El Derecho Inmobiliario es muy extenso y tiene ramas muy diferentes que resultan complicadas para los que no son expertos en la materia, así que lo mejor es contar con profesionales para poder resolver los problemas de forma rápida y sencilla.