Dentro del sector inmobiliario, existen multitud de términos con los que trabajamos a diario y conocemos a la perfección. Hay otros que suelen ser usarse con menos frecuencia, pero no por eso son menos importantes. Hoy vamos a explicar algunos de ellos para conocerlos mejor.

 

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Propietario Ausente

El propietario puede ser ausente al rentar o adquirir una propiedad. Sí, sabemos que puede sonar extraño, pero no nos engañemos: es de lo más común que hay. Pues significa que el dueño de la propiedad no habita en el lugar en venta o renta, ni ocupa espacio dentro del domicilio.

 

Cláusula de Aceleración

Esta cláusula se incorpora normalmente en los contratos hipotecarios, pues es la manera mediante la cual los bancos se aseguran de que sus hipotecados paguen a tiempo. En el caso de no hacerlo, podrían exigir el pago adelantado del préstamo. Sin embargo, en una negociación entre cliente y agente o particular, es del todo común encontrar esta sección en un contrato de arrendamiento. El objetivo es el mismo: asegurarse de que el inquilino deposite sus rentas en el plazo estipulado.

 

Enajenación

Al adquirir una propiedad, la enajenación se refiere a la acción que permite al antiguo dueño ceder los derechos del inmueble al nuevo propietario. Por eso mismo, existirá una escrituración nueva en el momento de la compra, porque el nuevo propietario debe aceptar los derechos y obligaciones de su nueva residencia. En cambio, cuando se escucha la frase “la casa está enajenada por hacienda”, significará que la vivienda ha sido embargada.

 

Amortizar

Un corredor puede amortizar pagos cuando que se le adelanta la suma del arrendamiento o compra. Es un método que puede beneficiar al inquilino al rentar una propiedad, ya que al pactar el adelanto de los pagos podrá ahorrar económicamente. En el caso de una hipoteca, amortizar pagos reducirá el interés que se genera por el préstamo.

 

Tasa de Capitalización

El agente de bienes raíces te lo suele mencionar para que lo tengas en cuenta si deseas vender o rentar tu propiedad en un futuro. Se trata de un cálculo de riesgo comercial que se lleva a cabo al invertir en una vivienda, indicando los gastos que se realizan al adquirirla. Cuanto más alta sea esta tasa, más rentabilidad tiene la residencia como objeto de valor.

 

Colateral

Cuando se utiliza la palabra colateral en una negociación inmobiliaria solamente puede indicar una cosa: es el bien que se deja en garantía en caso de no poder cubrirse con un acuerdo o monto a pagar. En un crédito es lo que se deja como “prenda”, avalando tu capacidad de pago. Como norma general, lo suele hacer directamente la persona que solicita el préstamo o alquiler.

Con este diccionario de términos inmobiliarios pretendemos que puedas sentirte más familiarizado con un vocabulario enrevesado donde los haya. Y ésta ha sido solo una primera entrega, pues el sector está tan lleno de conceptos complejos que nos veremos obligados a desentrañar el significado de los que hemos dejado en el tintero. Traduciremos este embrollo.

 

Con esta compilación de términos inmobiliarios pretendemos que puedas sentirte más familiarizado con un vocabulario enrevesado donde los haya. Recuerda que como asesor hipotecario e inmobiliario tu capacitación debe ser continua y de calidad.

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