Los factores que devalúan un inmueble son relevantes tanto para quien la compra, como para quién la vende, pero también para el asesor inmobiliario que se encarga de intermediar la compra venta y para el broker hipotecario que revisa la situación del inmueble. En este post conocerás cuales son esos factores y cómo prevenirlos.
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Es necesario que antes de que se realice la venta de un inmueble, se conozcan los riesgos principales que afectan la plusvalía del mismo, la cual definirá su valor final. Estos son los factores que devalúan un inmueble:
No dar mantenimiento calendarizado
Todos los inmuebles sufren de un desgaste por su uso, aún más si se trata de viviendas. Por todo esto es fundamental que se realice mantenimiento en áreas de mayor uso como baño y cocina con regularidad. Sin embargo, algunos dueños de estos inmuebles no lo hacen y se enfrentan a problemas mayores como goteras, filtraciones, daños estructurales, entre otros. Ésto factores afectan sorpresivamente al valor de la casa y por ende, devalúan su precio final.
Por ello es importante dar mantenimiento preventivo a los inmuebles sobre calendario y conforme los desperfectos aparezcan. De otra manera, los nuevo inquilinos o dueños podrán reclamar por vicios ocultos y afectar económicamente al vendedor.
Falta de infraestructura vial
La falta de acceso hacía avenidas y calles principales, así como la ausencia de transporte público, devalúan el valor de una casa. Es importante dar alternativas para nuevos dueños o inquilinos o mejorar la oferta del inmueble. Ya que el fácil acceso a los inmuebles es uno de los factores primordiales en su plusvalía y encontrarse en una colonia o fraccionamiento con baja competitividad, la disminuye.
Comercio ambulante y gasolineras
Las personas suelen creer que comprar una casa o propiedad afín cerca de comercios ambulantes o gasolineras es una ventaja por encima de otras opciones, pero la realidad es que no. La razón principal es que, en ocasiones, los puestos ambulantes generan malos olores, basura, saturación de calles y en algunos casos crimen organizado. Por otra parte, vivir cerca de gasolineras representa un potencial riesgo de siniestro.
Focos rojos de inseguridad
Los compradores de vivienda siempre estarán dispuestos a invertir más por un buen vecindario. Los brotes de violencia e inseguridad, aunque sean casi nulos, disminuyen la probabilidad de venta. Si la inseguridad o violencia se mantiene por un trimestre o más, se considera una zona con foco rojo y reduciría el valor de la propiedad. En cambio, si la situación mejora, el inmueble tardaría de 8 meses hasta un año en poder recuperar su valor original.
Construcción de nuevos desarrollos
La construcción de nuevos desarrollos podrían devaluar un inmueble, aunque no directamente. Es decir, con nuevas oportunidades de venta en la zona, la propiedad en venta tiene menos posibilidades de destacar por ser usada y con más años de antigüedad.
Integrar nuevas amenidades a la propiedad podría contrarrestar esta parte, por ejemplo un área de usos múltiples en la azotea o patio trasero, tirar paredes para ampliar los espacios, entre otros.
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