Es importante tomar en cuenta que la toma de riesgos es necesaria, ya que, si permaneces en una zona de confort, nunca lograrás colocarte en una posición de toma de decisiones arriesgadas, las cuales finalmente definirán quién eres y qué tan lejos quieres llegar.
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Las tomas de riesgos en los negocios están incluidas en muchas de las estrategias de una organización o proyecto y surgen de la posición estratégica en la que se encuentra la organización o proyecto, así como en el entorno en el que desarrolle su actividad.
Los riesgos de negocios tienen diferentes orígenes, se fundamentan a partir de la toma de decisiones propias y las de su entorno, por eso la importancia de contar con una gestión de riesgos profesional, este a su vez permitirá consolidar exitosamente los proyectos con buenos resultados. Esta gestión es diferente a solo asumir riesgos, ya que está parte a partir de un plan de gestión en el que previamente se han ido identificando los riesgos existentes en una empresa o proyecto con puntos de vista de distintas áreas y perspectivas, siendo una identificación multidisciplinaria.
El negocio de los bienes raíces es un juego riesgoso por naturaleza y no existe necesidad de convertirlo en un juego de azar puro, por lo que es conveniente tener un marco de trabajo básico establecido y un modelo de negocio que guíe el proceso de toma de decisiones, siendo el motor de crecimiento; en este caso la gestión de riesgos involucra a todo el equipo de trabajo del mismo modo que en la calidad total.
Cada persona es capaz de identificar riesgos al nivel en el que se encuentre, por ello la importancia de que como líder o gerente busques integrar las diversas versiones de las distintas personas con el fin de identificar riesgos que quizá desconozcas, ya que es imposible que una sola persona los identifique todos. Posteriormente, estos se deben analizar de modo cualitativo, cuantitativo o híbrido para generar un plan de acción, priorizando cuáles son los riesgos que hacen más daño al proyecto.
En este caso las acciones de respuesta serán monitorear el control de futuros riesgos y generar una cultura en las organizaciones o proyectos de su constante monitoreo, asumiéndolo como no algo opcional, sino requerido.
