¿Te gustaría optimizar tu tiempo, no tener que esperar a la jubilación para disfrutar de las grandes vacaciones que te mereces y escapar del típico trabajo de 40 o 50 horas semanales? Suena sorprendente, pero todo eso y mucho más lo puedes lograr trabajando solo cuatro horas diarias.
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Para alcanzar el éxito en cualquier negocio que quieras emprender es importante que te capacites y destruyas dos mitos que te impiden crecer. El primero es que necesitas trabajar un mínimo de cuarenta horas a la semana para conseguir ingresos altos y el segundo es que necesitas tener muchísimo dinero para disfrutar de la vida. Por tanto, en ambos casos el tema se centra en el trabajo y dinero, sacrificando tu felicidad y libertad por obtenerlo.
La semana laboral de cuatro horas no tiene como objetivo que dejes de trabajar y lleves una vida de ocio, al contrario, tiene como objetivo principal recuperar tiempo para ti sin dejar de obtener resultados, dedicarte a hacer algo en lo que eres bueno y disfrutas hacer, aumentando tu productividad mientras tienes la libertad absoluta para hacer lo que quieras sin sacrificar tu felicidad.
Para ser dueño de tu propio tiempo tienes que seguir una serie de principios que se enfocan principalmente en obtener objetivos realistas, centrarte en aquellos que potencian tus ingresos, eliminar tareas superfluas, evitar distracciones y pérdidas de tiempo, automatizar tus tareas y optimizar tus actividades.
En general, valerse de este conjunto de técnicas y herramientas te permitirá aprovechar tu tiempo al máximo, cumpliendo tus metas y lo más importante, ser dueño de tu propio tiempo.
