Muchos mexicanos reciben ingresos de rentar sus propiedades sin reportar ante autoridades las ganancias, es decir, evaden los deberes fiscales del arrendamiento. Al recibir las ganancias íntegras, tarde o temprano podría traerles repercusiones, pues el desconocimiento no exime de culpas. Si como asesor inmobiliario tienes clientes que renten inmuebles, te recomendamos orientarlos sobre las obligaciones fiscales que tienen, de las cuales te contamos más a continuación.
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Dentro de los servicios que puede ofrecer un asesor inmobiliario, se encuentra la intermediación en el arrendamiento de viviendas.
Lo primero que debes saber es que tipo de contribuyente es un arrendador porque de ahí se derivan las obligaciones fiscales que tiene ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT), en este caso todas las personas que alquilen sus propiedades, ya sean viviendas, edificios, bodegas, locales u oficinas pertenecen al régimen de arrendamiento.
Si tus clientes obtienen ingresos adicionales por actividades empresariales, pueden optar por el Régimen de Incorporación Fiscal (RIF) siempre y cuando sus ingresos no superen los 2 millones de pesos anuales.
✔️ Inscribirse en el RFC y mantener actualizada tu información, en caso de cambio de domicilio, aumento o disminución de obligaciones o suspensión de actividades.
✔️ Llevar una contabilidad adecuada, si se optó por realizar deducciones propias de la actividad.
✔️ Expedir comprobantes fiscales electrónicos, cuando tu cliente reciba el importe de la renta debe anotar el número de cuenta predial del inmueble. Esto es muy importante, pues en caso de juicio por impago el arrendador deberá acreditar haber emitido el CFDI correspondiente.
✔️ Solicitar comprobantes fiscales
✔️ Presentar declaraciones:
Los arrendadores están sometidos al Régimen de Arrendadores y puedes encontrar todas las regulaciones aplicables en:
Como asesor debes estar al tanto de las regulaciones principales que deben cumplir tus clientes y en caso de ser necesario, aconsejarles contratar a un experto en el tema, ya sea un abogado o un contador. Recuerda que debes ofrecer un servicio integral y ser empático con tus clientes para poder sobresalir en este sector tan competitivo.
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