En México la demanda de departamentos y casas en renta aumentó 6% mientras que la demanda de venta disminuyó 5% de noviembre 2019 a mayo 2020. En cuanto a la demanda para arrendamiento de locales comerciales aumentó 14% y la demanda de inmuebles comerciales en venta disminuyó 23% en el mismo periodo de tiempo. Como asesor inmobiliario es tu deber conocer estas estadísticas y más que eso conocer cuáles son las diferencias en el de tipo de contrato. En esta ocasión hablaremos sobre los contratos de arrendamiento para inmuebles comerciales y habitacionales.
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Conocer los aspectos legales que rigen los contratos de arrendamiento es fundamental para que puedas dar seguridad jurídica a tus clientes, con ello aseguras no caer ante un fraude.
Los contratos de arrendamiento para locales comerciales son distintos a los contratos de arrendamiento de uso habitacional. Si bien ambos contratos deben ser consensuados, bilaterales y onerosos, al tratarse de un inmueble comercial puede haber ciertas restricciones en cuanto al uso o modificaciones del local así como cláusulas más restrictivas.
La naturaleza del contrato para arrendamiento se define a partir del uso que se le dará al inmueble, es decir si es con afán de lucro o para uso habitacional. En este sentido los inmuebles para arrendamiento comercial están regidos por contratos mercantiles en los que pueden participar personas físicas y morales. Sin embargo para que pueda ser un contrato mercantil se deben cumplir dos características que son:
- Afán de lucro.
- Preponderancia económica.
Una característica de los contratos mercantiles es que están regidos por el Código de Comercio mientras que su competencia en tribunales la tienen los juzgados locales o federales.
En cuanto al arrendamiento para uso habitacional se utilizan contratos civiles regidos por el Código Civil local donde se realizará el contrato. En este tipo de contratos únicamente pueden participar personas físicas y en caso de incumplimiento su competencia la tienen los tribunales civiles.
Para tener éxito en el sector inmobiliario debes conocer todas las áreas del mismo, incluyendo las legales y las comerciales, así como aspectos comerciales. Ser un experto inmobiliario implica capacitarte constantemente a través de cursos, diplomados o webinars especializados.
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