Un remate inmobiliario es un proceso jurídico en el cual se ordena el remate de una propiedad debido a que su propietario es demandado, en este caso existen diversas razones como alguna hipoteca, demandas, deudas, etc., pero en términos generales es porque no ha cumplido con sus obligaciones y por ello, el inmueble se pone a la venta.
También te puede interesar: 5 características para fijar el precio de un inmueble
Cualquier persona de nacionalidad mexicana o incluso extranjeros puede participar en un remate inmobiliario, la única restricción es ser mayor de edad. En él pueden invertir personas físicas, pool de inversionistas, persona moral constituida o en busca de inversión inmobiliaria.
La duración de un remate puede variar dependiendo de la situación legal en la que se encuentre el inmueble, la defensa que implemente el deudor, el calendario laboral de los juzgados y el trabajo que desarrollen los abogados involucrados en el trámite.
Tipos de remates bancarios en México
Bancarios
Se presenta en caso de que el banco hipoteque un inmueble, y el particular no lo pueda paga. Por lo que automáticamente pasa a ser propiedad del banco, quien se encarga de subastar la propiedad para cualquier interesado sin realizar la escrituración, generando una cesión de derechos adjudicatarios a quién lo compre, con lo que se convierte en el propietario del inmueble, esta compra se debe formalizar ante un notario público.
Este tipo de propiedades se pueden adquirir a través de compras de crédito y de contado con un 80% de seguridad en las operaciones financieras, ya que se compra directamente al banco y se evita lidiar con problemas legales.
Judiciales
Este tipo de remates se subdividen en litigiosos y adjudicados. Se definen como ventas de bienes inmuebles que se subastan en un juzgado, respecto a las deudas no cumplidas, donde se le pone un precio de salida al inmueble (puja), en el que los interesados compiten entre sí para adquirirlo. En este caso, el mejor postor requiere generar una operación de contado sin excepción para adquirir el inmueble.
Este tipo de operaciones están recomendadas a aquellas personas que dominan el ámbito legal, o cuenten con el respaldo de un bufete de abogados, es relevante tomar en cuenta que el costo de la propiedad puede ser bajo, pero los gastos legales ser altos, ya que se debe tomar en cuenta revisar: predial, agua, luz, que nadie viva ahí, honorarios de los abogados, etc.
Particular o privado
Se da cuando las personas que se encuentran en un apuro económico o no pueden pagar su crédito, en esta situación para adquirir la propiedad se pueden meter créditos Infonavit, bancarios o incluso hacer el pago de contado, siempre y cuando esté al corriente con las mensualidades.
Es importante conocer las características de cada tipo de remate, valuando la propiedad para saber si se está realizando una buena inversión, investigar al deudor y los juicios que tenga en su contra, verificar el crédito hipotecario, líneas de crédito, deudas a pagar, el estatus de la propiedad ante el Registro Público de la Propiedad, etc.
Sobre todo, analiza tu perfil de inversionista y determina los gastos de inversión, así tendrá una perspectiva de ganancia mucho más clara.
