De acuerdo con la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, solo los mexicanos nacidos en el país o naturalizados, o las sociedades acreditadas como mexicanas pueden ser dueños de una propiedad privada en el territorio nacional. Sin embargo, los extranjeros puede comprar casas en México siempre y cuando cumplan con ciertos requerimientos, que les permitan adquirir bienes raíces en México. Te contamos todo.

 

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El principal requisito es un convenio en el que el extranjero renuncia a la posibilidad de invocar la protección de su gobierno con respecto a los bienes, los cuales deberán estar fuera de la llamada “zona restringida”  que son áreas geográficas que se extienden a 50km de las costas y a 100 km de las fronteras de nuestro país.

Las personas extranjeras están sujetos al cumplimiento de determinados ordenamientos jurídicos que establecen que si un extranjero desea adquirir inmuebles dentro de éstas zonas lo podrán hacer, pero no podrán poseer un título sobre el mismo, es decir, el extranjero no tendrá una escritura de compraventa de inmuebles que lo acredite como legítimo propietario, pero podrá fungir como tal dentro de un periodo de tiempo determinado. 

Por su parte, el extranjero puede tramitar un contrato de fideicomiso y celebrarlo entre el propietario de un inmueble y un banco mexicano con la finalidad de que el extranjero que desea adquirir el inmueble tenga el beneficio del uso y goce del mismo. El banco fiduciario será quien adquiera el inmueble en representación del extranjero fideicomisario, y quien retenga la titularidad del inmueble, no obstante, la obligación fiduciaria del banco establece que el extranjero tendrá todos los beneficios de uso y goce que establece la ley y actuará en beneficio del propietario fideicomitente y del extranjero fideicomisario.

Por su parte, el banco fiduciario administra y retiene el título del inmueble por períodos de cincuenta años cada uno, durante ese periodo el extranjero podrá vender, rentar, hipotecar, donar, heredar, etc. el inmueble en cuestión con la autorización expresa del banco y del propietario del inmueble fideicomitente, en caso de que no la venda y a solicitud de las partes podrá renovarse el fideicomiso por otro periodo de cincuenta años. 

Las zonas no restringidas son aquellas áreas geográficas de la república mexicana que se extiende fuera de las zonas restringidas mencionadas anteriormente. En estas zonas un extranjero no se verá limitado al adquirir a título personal un inmueble, es decir, podrá actuar como legítimo propietario y por consiguiente podrá obtener una escritura de compra-venta con los mismos derechos y obligaciones que establece la ley para los mexicanos.

No obstante lo anterior, si un extranjero desea adquirir un inmueble fuera de zonas restringidas por primera vez, deberá solicitar a la Secretaría de Relaciones Exteriores un permiso especial para hacerlo bajo los términos del mismo tiempo establecido anteriormente. Si el extranjero vende el inmueble y desea adquirir otro, no requerirá solicitar nuevamente el permiso.

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