El proceso de compraventa de un inmueble nunca ha sido sencillo, por eso es que existimos profesionales inmobiliarios que brindamos un servicio de excelente calidad para aquellos que confían en nosotros, su patrimonio. Sin embargo, tras la pandemia del COVID-19, el sentir social ha cambiado y es indispensable que incrementemos nuestras fortalezas para continuar creando lazos de confianza con nuestros clientes.

Es de vital importancia que como trabajador, además de contar con estudios académicos que avalen tus conocimientos y experiencias, cuentes con una serie de competencias o habilidades que determinarán qué tan competente eres. Estas habilidades influyen en crear un buen clima laboral, algo imprescindible para tener un mayor rendimiento y productividad. 

Tal y como ya está ocurriendo en otros sectores, el inmobiliario también está cambiando a marchas forzadas desde la llegada de la pandemia, ha cambiado la forma en cómo las personas compran, venden y alquilan inmuebles.

Para poder atender a los nuevos consumidores digitales, los agentes inmobiliarios tienen que adecuar su manera de relacionarse con ellos y adaptar sus herramientas para estar en consonancia con los nuevos usos digitales y no perder potenciales clientes.

Decidirse por comprar una casa es tal vez, la decisión más grande de una persona o de una familia. Se debe alcanzar una madurez económica para hacer frente al desafío económico de contratar una hipoteca por 15, 20 o 30 años. Por eso mismo, no es una decisión que se tome de manera fácil y rápida. El cliente potencial que decida comprar una casa o contratar un crédito hipotecario debe pasar por un proceso de compra.